Hace unos días hice un chorri-reel, como yo llamo a estos videos cortos de Instagram donde ponemos humor a cosas que pueden no hacer tanta gracia en la vida real, sobre lo que les ocurre en verano a muchas embarazadas.

 Aquí puedes ver el reel “vacaciones del embarazo

 Llega el calor, llegan las vacaciones, las profesionales se van a sus merecidas vacaciones, y en muchos de los servicios no hay sustitución y se cierra.

 

Esto pasa tanto en los servicios públicos como en los privados: se paran las clases de preparación al parto, termina el yoga para embarazadas, los grupos de apoyo a la lactancia descansan, nos despedimos incluso de la matrona del centro de salud porque no le han puesto sustituta (te animo a hacer una reclamación).

 

¿Y ahora qué hago? ¿Me voy de vacaciones del embarazo? ¿Lo pongo en pause?

 

Aunque no fue mi experiencia, si lo es para algunas de las mujeres que he acompañado y estoy acompañando. Y puede ser una situación muy estresante, puesto que te enfrentas a no poder resolver tus dudas, al miedo a no tener una atención adecuada si te pones de parto, a vivir un posparto aun más solitario…

 

No tengo una varita mágica para esto, pero si tengo la habilidad de acompañarte a encontrar los recursos que necesitas para tu situación, de crear tu propia mochila de contactos para seguir disfrutando esta aventura con tranquilidad y seguridad.

 

¿Quieres que hablemos de lo que te preocupa? Escríbeme aquí, agendamos una sesión para conocernos y vemos juntas en qué puedo ayudarte.